¿Son efectivos los dispositivos móviles de detección de crisis?
La
epilepsia es el trastorno neurológico más común durante la infancia. Los
afectados y su entorno pueden vivir condicionados por la posibilidad de una
crisis epiléptica y sus posibles consecuencias como accidentes, lesiones e
incluso la muerte súbita inexplicable (SUDEP). Esta falta de previsibilidad en
las crisis puede constituir una importante limitación de la independencia de
las personas y condicionar la calidad de vida. Es por ello que en los últimos años se han desarrollado varios tipos de dispositivos sensibles al movimiento, diseñados para detectar
crisis, con el objetivo final de tratar de mejorar la calidad de vida de las
personas con epilepsia y de su entorno.
La
eficacia y fiabilidad de uno de estos dispositivos ha sido puesta a prueba en
el Hospital Infantil Le Bonheur, Memphis, Tennessee, EEUU. Los resultados
acaban de ser publicados online en la revista Pediatric Neurology. Este dispositivo en forma de reloj de pulsera
registra los movimientos y puede enviar alertas a personas cercanas cuando
detecta movimientos agitados y repetitivos. A diferencia de otros artilugios,
este dispositivo tiene la ventaja de ser móvil y poder utilizarse durante el
día. También cuenta con un botón con el que la propia persona puede enviar un
mensaje, por ejemplo si nota un inicio de sus crisis (aura).
Los
investigadores compararon el sistema de detección y la información recogida con
este aparato con la obtenida simultáneamente durante un video EEG que es el
método más fiable para el registro adecuado de las crisis epilépticas. En el
estudio participaron 143 personas entre 2 y 41 años, con distintos tipos de
crisis epilépticas. De media, este aparato detectó el 16% de las crisis,
logrando sus mejores resultados con las crisis tónico-clónicas generalizadas,
de las que detectó el 31%. Sus peores resultados fueron con crisis parciales
complejas o focales con escasos movimientos (2%) y en crisis mioclónicas o mioclónicas-tónicas,
de las que no logró detectar ninguna.
Independientemente
del tipo de crisis, el estudio evaluó la eficacia del dispositivo en la
detección de crisis con movimientos repetitivos del brazo logrando detectar
hasta el 34% de las crisis con movimientos fuertes y rítmicos del brazo y el
10% de las crisis que no lo tenían.
Estos
resultados, aunque prometedores, ponen de manifiesto la dificultad técnica que
aún presentan estos dispositivos para detectar crisis epilépticas y de que
queda mucho por hacer para mejorar su fiabilidad y exactitud. No obstante sigue
habiendo la necesidad de un dispositivo fiable y fácilmente transportable, que
permita detectar las crisis epilépticas en sus distintas variedades clínicas.
Un dispositivo así aumentaría enormemente la autonomía y calidad de vida de los
afectados por la epilepsia y sus familiares.
Para
saber más:
Patterson et al. (2015). SmartWatch by SmartMonitor: Assessment of Seizure Detection
Efficacy for Various Seizure Types in Children, a Large Prospective
Single-Center Study. Pediatric Neurology, 1–3.